Al árbol de limón mesino que sembró Luis en 2018 en nuestra casa de Altamoravia .
Entre tus ramas busco el acertijo igual que el pájaro lugar para su nido.
Y encuentro
tus pelotitas verdes
jugosas y silentes
que están por reventar.
Al árbol de limón mesino que sembró Luis en 2018 en nuestra casa de Altamoravia .
Entre tus ramas busco el acertijo igual que el pájaro lugar para su nido.
Y encuentro
tus pelotitas verdes
jugosas y silentes
que están por reventar.
Adoro esta manzana que mis dientes trituran y que mi cuerpo goza. Tiene rubor de vida con rica savia dulce y textura terrosa.
Atrás dejó su árbol y sus hojas.
Parece un cuento de hadas sus azahares, aromas, el sol, el riego,
el vuelo y las abejas…
que condensa en su sabor
y que explota en mi boca.
Sola está entre mis manos; y parece que sorbo en un bocado loco,
algo de levedad de Eva
y de gnosis de Newton, más una gota amarga
de la manzana roja
que comió Allan Turing.